La fotografía de larga exposición es una entrada a otra dimensión, es el llegar y accesar a un lugar que nuestros ojos y nuestra percepción no pueden ver. Es algo que esta allí pero a su vez no está, es etéreo, es efímero y a su vez es permanente, es la esencia mas básica de los elementos frente a nosotros y de lo que es pasajero. Cuando descubrí este tipo de fotografía hace tal vez unos 10 años, no poseía las herramientas ni el conocimiento para entrar en esa dimensión, solo estaba armado con una pequeña cámara “Point & Shot” Canon que tenía un modo para tomar exposiciones de hasta 15 segundos el cual empecé a utilizar por casualidad para capturar efectos extraños con un foco, ver una raya de luz con forma de espada, fantasmas de movimientos y eso me cautivó. Años después y ya armado con una mi segunda DSLR redescubrí esa dimensión escondida y decidí sumergirme de lleno en ella para experimentar todo lo que tiene para ofrecer.
Costa Rica tiene acceso al Mar Caribe y al Oceáno Pacífico por lo cual tenemos una gran variedad de playas para todos los gustos, desde playas de arena blanca, amarilla y negra y todas las variedades entre estas, formaciones rocosas hermosas y coloridas y es en estas zonas donde la fotografía de larga exposición siento que tiene el potencial de brillar mas fuerte. Apenas estoy empezando a descubrir estos lugares, me gusta navegar por mapas virtuales buscando locaciones poco visitadas por la gente y después hacer maletas y embarcarme en la aventura de ir a los mismos y sorprenderme y maravillarme al llegar por primera vez a ese lugar extraño y empezar a explorar, ver las posibilidades, absorver un poco de la esencia y después sumergirme en esa otra extraña dimensión a la que vamos los fotógrafos cuando estamos en lo nuestro, donde el mundo deja de existir por momentos mientras admiramos la belleza y tratamos de capturarla, la imaginamos muchas veces por que no esta ahí, la transformamos y mutamos con cada encuadre, con cada ajuste que hacemos, nos sentimos uno con ella, nos sentimos distanciados cuando no logramos conectarnos, cuando ponemos atención al reloj, al teléfono, a la otra gente.
Nos sentimos solos y nos sentimos parte de todo, queremos que todos lo puedan ver como nosotros los vimos, como lo imaginamos, esa otra dimensión que no existe, que no estáahí, pero que te voy a mostrar con estas fotografias. Luis Figuer es un administrador de proyectos y aficionado a la fotografía nacido en Costa Rica en 1976.
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