La investigación tiene como propósito ahondar en la historia y el patrimonio de la comuna de San Miguel a partir de la vivienda como un contenedor de memoria. En los últimos años el lugar ha sufrido el proceso de modernización urbana que no ha reparado en el patrimonio.
Muy por el contrario, se han superpuesto valores mercantiles que han socavado espacios que otrora fueran representativos de la identidad y de la historia de dichos lugares. Esta situación puede evidenciarse en la masiva demolición de viviendas en pos de la construcción de edificios nuevos que se acoplan con un ideal de vida moderna. Para efecto de este proyecto se entiende como modernidad el proyecto racional y ordenador de la urbe, como la máxima expresión del afán modernizador. El proyecto tiene como principal concepto la memoria, que se proyecta como una nostalgia de lugares no ajena a mi historia, ya que son espacios en los cuales he habitado y que de esta forma han definido mi identidad como sujeto.
Esta problemática se hace extensible a otras familias que en la actualidad viven la misma experiencia, de desalojo, traslado y finalmente un cambio de vida. Entonces la memoria es una experiencia amplia y líquida, que se intenta reproducir y representar fotográficamente con el fin de solidificar y moldear esta memoria para la comprensión de la sociedad.
Por tanto el principal interés que genera este proyecto es verificar cómo la modernización ha afectado la historia y la memoria de un barrio de la comuna de San Miguel, con el derrumbe de domicilios, que provoca que las familias tendrán que irse del lugar. Esta acción reducirá a escombros y polvillos la memoria, pero a la vez construirán una nueva edificación y así esto se convierte en un ciclo constante de cambio originado en este periodo de sobre-modernización como lo llama el antropólogo francés Marc Augé quien crea este concepto. “La sobre modernidad es productora de no lugares, es decir, de espacios que no son en si lugares antropológicos y que, contrariamente a la modernidad baudelariana no integran los lugares antiguos: estos catalogados, clasificados y promovidos a la categoría de lugares de memoria” En el caso del álbum familiar, éste se presenta como una introducción a cada casa fotografiada. Su representación será a través de un mural con las fotografías de cada familia que ahí vivió.
La casa es un contenedor de memoria al igual que un álbum familiar, en ella se guardan las historias de la gente que residió. De una u otra manera, se atesoran las vivencias ocurridas ahí a través de los muebles, las paredes, los objetos e incluso el álbum familiar. Un concepto lleva al otro, sin la casa no existe el álbum, y sin el álbum no hay historia. Es por eso, que ambos son importantes en este proyecto, y juntos dan vida a la memoria de hogar. Por otro lado y más bien desde la perspectiva visual, utilizaré la fotografía nocturna, para tensionar y potenciar los espacios a fotografiar, una muerte anunciada de las casonas por la “luz” del progreso.
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